Otro eslabón de tu cadena; entrevista a Diego Peñafiel

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En nuestro primer contenido hemos contado con la colaboración de Diego Peñafiel, presidente de ALEA, que acaba de publicar su primer libro: Otro eslabón de tu cadena.

A través de una breve entrevista nos cuenta cómo ha sido el proceso de publicar por primera vez una novela y qué consejos nos da a aquellos que, como él, deseamos ver publicadas nuestras obras literarias.

En su primera novela Diego ha decidido abarcar la historia de Guinea Ecuatorial y las contradicciones e injusticias políticas que arraigaron una constricción política, económica y social que perdura hasta el día de hoy. Una parábola que narra la vida ecuatoguineana, pero que nos habla de los estigmas que persiguen a todas las culturas del mundo. Un tema complejo y profundo que parte de las voces de sus dos protagonistas: Menbeng Esangon; una joven exprofesora de un pequeño pueblo de la Guinea Ecuatorial de 1976 que está asolada por el sanguinario régimen de Macías Nguema quien, atormentada por la situación en la que vive, decide luchar por lo que cree, y Akin Odole; un militar de la capital con una situación privilegiada pero una conciencia perturbada.

¿Por qué te interesó este tema en particular?

En el 2009 me fui de voluntario a Guinea Ecuatorial con la Asociación Africanista Manuel Iradier. Lo que inicialmente iba a ser un viaje de un mero mes experiencial, se convirtió en un intenso medio año. Allí me sensibilicé con la situación que vivían y germinó la semilla que dio lugar a esta novela. Por otro lado, la subtrama de la novela, no con menor peso que la trama principal, habla sobre las creencias sociales limitantes que evitan que avances y luches por lo que crees o quieres. Este es un tema que desde muy joven ha suscitado un gran interés en mí.

¿Cómo fue el proceso de documentación para tu novela?

Arduo y constante. A menudo me pasaba que creía tenerlo todo atado y creaba una versión de los hechos, pero descubría otro libro o documento, que cambiaba algún detalle o la realidad de los hechos; entonces me tenía que poner otra vez a reescribir la novela. De todos modos, pese a que en diferentes medios la están etiquetando como novela histórica, no considero que sea el género principal del libro. He intentado concebir una novela que mezcla los géneros históricos, de realización personal y crítica social. Creo que se apoya en los tres por igual, pero el histórico es más fácil de catalogar y diferenciar, así que la nombran como tal, pero no he querido hacer un libro categórico con datos y hechos históricos fundamentalistas; no, he querido mostrar los hechos tal y como yo los he percibido, después de haber vivido allí y haberme documentado durante años.

¿Qué consejos darías a alguien que desea escribir su primera novela?

Escribir, leer, corregir, escribir, leer y corregir. También me ha ayudado mucho el inscribirme en talleres literarios y conocer diferentes puntos de vista, ampliar mi espectro de lectura y, por lo tanto, de escritura. El compartir textos con otras personas te ayuda muchísimo a pulir tus manuscritos y a madurar un ojo más crítico.

¿Te ha resultado muy complicado encontrar editorial?

Muchísimo, hoy en día todos sabemos lo eclipsado que está el mercado y lo complicado que es que te publiquen siendo un escritor novel. Antes de que me aceptasen el manuscrito, se lo envié a casi sesenta entes entre editoriales y agentes literarios. Pero eso me ayudó a mejorar mi texto y hacer una versión más trabajada.

¿Qué destacarías de esta experiencia?

¡Buf! La verdad, que no sabría qué destacar de esta experiencia. He tenido diferentes momentos, han sido nueve años de aprender a escribir y crear esta novela. Ha habido tanto momentos de sacrificio y frustración como de alegría y plenitud. He vivido la escritura de diferentes formas en función de cómo he ido madurando en todos los sentidos.